La película Just Mercy (Cuestión de justicia) está basada en una historia real, la misma trata sobre un abogado de la universidad de Harvard llamado Bryan Stevenson, quien desde pequeño fue sintiendo el deseo por ir en defensa de quienes, por su color de piel, habían sido condenados errónea e injustamente, y en favor de quienes simplemente no tenían los recursos necesarios para tener un buen representante legal.
Por lo que una vez graduado y contando con el apoyo de la activista Eva Ansley, nuestro Bryan logra abrir un centro jurídico dirigido a reclusos injustamente encarcelados, dedicándose a trabajar en su defensa, como tal es el caso de Walter McMillian, el cual había sido sentenciado a pena de muerte por el asesinato de una joven de 18 años, sin ni siquiera tener en su contra las pruebas suficientes, sólo un único testigo, un delincuente que decía haberlo visto cerca de la joven con el arma en mano. Por lo que durante los siguientes años nuestro Bryan, a pesar de tener el propio sistema legal en su contra, se dedicó a superar tales injusticias cometidas por medio de maniobras legales y políticas, y de un evidente racismo descarado, luchando así a favor de Walter y de otros como él. Con el tiempo, aquél falso testigo se negó a seguir sosteniendo su testimonio en contra de Walter, pero llevo mucho tiempo de esfuerzo lograr y obtener justicia, más en medio de un sistema legal donde abunda la corrupción, los “acuerdos” , y sobre todo una cultura de odio y xenofobia, así como también la indiferencia de quienes estando conscientes de las injusticias, no hacen nada.
Esta película, refleja la debilidad que se pueden encontrar no sólo en el sistema legal norteamericano, sino en cualquier otro sistema. Muestra como la injusticia se puede colar fácilmente cuando hay tantas irregularidades de por medio, tanta falta de ética, de consciencia social y humana, cuando los beneficios particulares de unos cuantos, están por encima de lo que es justo. De igual forma, está grandiosa película nos invita a trabajar en equipo, a ser pacientes y perseverantes, a luchar siempre en favor de la justicia y del bien común.
pobre de los que están en el sistema penal
ResponderEliminar